Pregunta.- Señora Rico, buenas tardes. Cuáles van a ser grosso modo las novedades más importantes en las ediciones de fin de semana ante los nuevos retos que afronta el diario? Un saludo
Respuesta.- Hola, Patricio. Las ediciones de fin de semana son particularmente complejas, porque incluyen muchos contenidos diferentes, revistas y suplementos. Vamos a intentar armonizar la oferta, y definir mejor los soportes. Abrir más espacios para el análisis y la reflexión, algo que en el día a día es más difícil por la inmediatez, y servir de puente con los debates globales. Y diversificar el abanico de reportajes, intentando tomar el pulso a la vida cotidiana, más allá de la política. Otros dos objetivos, compartidos por todo el diario, es lograr una mayor interrelación con América Latina, tanto en contenidos como en colaboradores, y mejorar y enriquecer la edición digital.
P.- Qué valor otorga a las actividades de ocio para publicar contenidos sobre ellas en la edición de fin d e semana?
R.- Siempre han sido muy importantes. EL PAIS ha tenido y tiene excelentes periodistas y expertos que informan sobre las actividades de ocio en el El Pais Semanal, El Viajero y en las páginas del diario del fin de semana. A medida que se multiplica la oferta, tener guías en los medios es esencial. Dicho esto, creo que hay margen para mejorar.
P.- ¿No cree que falta un “Liberation” en España? Hay periodicos pequeños comprometidos y de calidad y pero los grandes medios parecen más preocupados por llegar a la gran masa y anunciar coches y bancos. Un saludo
R.- Hola, Juan. Yo diría que el tamaño no importa. Hay grandes medios de calidad (New York Times, The Guardian o Le Monde) y pequeños malos, y al revés. Libération aspira a tener la mayor difusión posible, como todos, y anuncia también coches y bancos. Es una cuestión de supervivencia. Eso no está reñido con la calidad. El sector está en plena crisis y en España hay unos índices de lectura bastante pobres. A pesar de eso, hay medios interesantes, y pequeños, que han encontrado su nicho en Internet.
P.- que les ha movido para hablar mas sobre vinos ultimamente ?
R.- Hola, Fructuoso. El vino es uno de los pilares culturales y económicos de España, la producción se ha multiplicado y diversificado por todas partes. Yo diría que hasta ha pasado la fiebre un poco “snob” que podía haber hace algunos años, cuando los precios estaban por las nubes y se imponía el “vino de autor”. Ha aumentado el conocimiento y se están haciendo muy buenos vinos y a precios cada vez más competitivos. Es un sector clave.
P.- ¿Sigue usted pensando que hay que escribir contra aquel que le niega el acceso a SUS ruedas de prensa? Siempre que no sea de derechas, claro
R.- No me queda muy clara su pregunta, pero como periodista rechazo de plano las ruedas de prensa “selectivas”, donde hay cuotas de entrada y donde se veta a determinados medios porque se considera que no “sirven a la causa”. Quienes actúan así no quieren periodistas, quieren propagandistas. Tampoco me parecen recibo las “ruedas de prensa” sin preguntas, que se han puesto de moda en estos tiempos. Tengo la sensación de que a veces los políticos (y no solo ellos) toman a los periodistas como simples recaderos, y en eso nosotros también tenemos nuestra responsabilidad. Creo, y esto es una opinión estrictamente personal, que los medios deberían calibrar si vale la pena atender o no esa clase de convocatorias. Un simple comunicado de prensa ahorraría tiempo a todo el mundo.
P.- A qué periodista admiras más? Mójate un poco. Saludos
R.- Hola Doniphon. No es por no mojarme, pero nunca he sido muy de ídolos, y con los años, menos todavía. Admiro a los periodistas que hacen bien su trabajo, de forma reponsable y rigurosa, que asumen su profesión como un servicio público, que intentan responder a todas las preguntas, peleando con la pereza y los prejuicios. En suma, que actúan de forma honesta. He conocido a periodistas en emisoras comunitarias en Centroamérica que me despiertan tanta admiración como el mejor reportero del New Yorker, que cuenta con medios increíbles y todo el tiempo del mundo para escribir sus crónicas. No me gustan los periodistas que buscan el estrellato mediático y que pretenden suplantar a los verdaderos protagonistas de una historia.
P.- ¿Cómo va a enfocar El País semanal? Hay reportajes de moda que chirrían junto a otros de catástrofes y desgracias.
R.- Hola, Omar. A eso me refería cuando antes comentaba que queremos armonizar los contenidos. La moda y las catástrofes son temas de interés informativo, pero junto a los criterios del interés y de la calidad periodística, es necesario definir los espacios adecuados para cada cosa.
P.- ¿Estás condicionada por el descarado giro a la derecha que Antonio Caño ha puesto en marcha o tienes total libertad de edición?
R.- Hola, A.Z. Haces una afirmación y una pregunta. La afirmación no se sostiene, y con respecto a la pregunta, te diré que tengo absoluta libertad en mi trabajo. En este país se está haciendo un periodismo de trinchera, y parece que tienes que ir al quiosco con el carné de militante en la boca. Hay público que no busca tanto informarse como afianzarse en las ideas, y a eso hemos contribuido todos los medios: periódicos, televisiones, emisoras de radio. Los periodistas hemos entrado de lleno en la brega política, e incluso somos partícipes. Hay que empezar a romper con todo eso. Se trata de recuperar el distanciamiento y el sentido crítico, y de apelar al cerebro de los lectores, no al hígado.
P.- Buenas tardes Maite ¿Qué ha aportado en tu experiencia profesional tu paso por los informativos de la SER de fin de semana?
R.- Hola, Carlos: en la SER estuve hace muchos años, haciendo las prácticas de verano en servicios informativos. Lo sufrí (al principio tenía pánico al micrófono) y con el tiempo lo disfruté mucho. Me aportó, ante todo, agilidad y me enseñó qué significa la economía en el lenguaje. La radio me gusta mucho, pero como oyente. Como periodista, estoy más cómoda en medios escritos.
P.- Enhorabuena por su nombramiento. Me encantan las historias de ciencia de El País Semanal por la forma en que se tratan, sus implicaciones sociales y su amenidad, y me gustaría preguntarle si piensa potenciar este tipo de historias que ya apenas se encuentran en los demás medios españoles de papel. Muchas gracias.
R.- Hola, Waeri. Es cierto que la ciencia y la tecnología despiertan cada vez más interés, y uno de los objetivos en esta nueva etapa es enriquecer y potenciar esos temas.
P.- El País, como cualquier otro periódico, tiene derecho a tener una línea editorial ¿Pero cree que es legítimo que El País asuma como propia la misión inequívocamente política de trabajar para que los gobiernos cubano y venezolano sean derrocados? ¿Se puede creer en un periódico que se fija este tipo de metas?
R.- Hola, Jose Andrés. Hasta donde yo sé, y trabajo aquí, EL PAIS no ha asumido la misión de derrocar gobiernos. Lo que sí hace es publicar informaciones que otros quieren ocultar, y abrir los espacios a quienes son silenciados. Por eso fue un elemento importante en las transiciones a la democracia en varios países, empezando por España y siguiendo por las dictaduras militares en Latinoamérica. Y por eso seguirá haciendo lo mismo en el caso de Venezuela y Cuba. La defensa de la libertad es uno de los principios fundacionales de este diario.
P.- ¿Que sintió al ver la foto falsa de Hugo Chavez publicada por El País en enero de 2013?
R.- Sentí un enorme coraje. Porque EL PAIS está haciendo una gran cobertura de América Latina en general, y de Venezuela en particular, y esa clase de errores daña el trabajo esforzado de sus periodistas.
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