Carlos Boyero

Pregunta.- ¿Qué te parece la carrera de Lawrence Kasdan después de el turista accidental?.

Respuesta.- Lamentable. Con Grand canyon, su pretendido humanismo y su lírica blanda, empecé a mosquearme. Pero todo lo que ha venido después ha sido mucho peor. ¿Se seca la inteligencia? Siempre recordaré los momentos hermosos que me regaló antes este hombre. Nunca me cansaré de volver a ver Fuego en el cuerpo, Reencuentro y El turista accidental. No es el único director brillante de Hollywood que perdió su talento. Vea el caso de Walter Hill.

P.- Sé que hay películas de él que te estresan, pero no te parece Paul Thomas Anderson uno de los mejores directores del mundo? Tienes ganas de ver su nueva película adaptando a Pynchon?

R.- Es uno de los más personales y reconocibles entre los directores actuales. La primera parte de Pozos de ambición es excelente, después se la va la olla. The master tiene cosas magníficas (qué grande era Philip Seymour Hoffman) y otras que me cargan. Jamás le encontré la gracia a Embriagado de amor. Pero las que resisten inmejorablemente el paso del tiempo son las apasionantes Magnolia y Boogie nights. Thomas Pynchon no es uno de mis escritores favoritos.

P.- ¿Recuerda la época dorada de los videoclubs y aquellas cintas de VHS? ¿Guarda alguna de esas cintas? Cualquier tiempo pasado fue…

R.- Tiré todo el VHS y lo reemplacé gastándome un pastón en el DVD. Regalé todo el DVD y lo reemplacé gastándome un pastón en el Blu-ray. Ya no voy a tirar más. Y sospecho que el Blu-ray formará anacrónica parte de la historia audiovisual dentro de poco. Con lo cual, me voy a comprar cinco aparatos de Blu-ray, ya que dejarán de fabricarlos. Y con ese formato, pasaré lo que me quede de vida. Estoy hasta los huevos de evolución tecnológica. ¿Se ha fijado usted en que antes los electrodomésticos duraban mogollón y ahora tienen un muy breve plazo de finitud? En nombre del negocio, por supuesto. Me cuenta un amigo que eso se llama obsolescencia programada. Tiene cojones el nombrecito. O sea, puro negocio. Y que nadie se atreva a llamarlo estafa, que le demandan.

P.- ¿Alguna vez has pisado un gimnasio?

R.- Todas las mañanas. Y si puedo, también voy por la tarde. Tengo un modelo para cada momento. Igualmente, el fin de semana hago fitness. Y si vive usted en mi barrio, me verá corriendo frecuentemente. ¿Se está quedando conmigo? Mis gimnasios siempre fueron los bares y los cines. Y tiene su mérito físico aguantar en el taburete sin caerte después del séptimo whisky.

P.- ¿Qué hacías el domingo en Las Rozas junto a una bella mujer?

R.- Esa bella mujer, que es mi novia, vive allí. Voy a ir disfrazado de alienígena para que no me reconozcan. Los cuatro años que hice un programa en televisión, la foto en el periódico y los videoblogs me han jodido el anonimato.

P.- Hola Carlos, usted me hace sentir muy cachonda; ¿Que me recomienda para bajar este fuego que me quema cada vez que lo veo?

R.- Vale. El uso sabio de los dedos la puede aliviar. Y en los sex-shops venden unos consoladores estupendos.

P.- Hola Carlos, aprovechando el centenario de su nacimiento en la pantalla, y aunque yo soy más de Buster Keaton, ¿no te parece el final de City Lights de Chaplin el más emocionante de la historia del cine? Un abrazo.

R.- Es muy bonito. También muy triste. Adoro no solo al Keaton actor y director. Sospecho que también debía de ser un tío cojonudo. Y las pasó putas. Vivió la mayor parte de su existencia en el olvido de la industria y de la gente. Es injusto. Sin embargo, Chaplin jamás me cayó bien. Sus memorias son vomitivas. Y de acuerdo, era genial. Aunque hay películas suyas que no soporto, como El gran dictador, Un rey en Nueva York o La condesa de Hong Kong. Sí me gustan mucho, aparte de sus clásicos, dos que fueron un fracaso: Una mujer de París y Monsieur Verdoux.

P.- Buenas tardes!espero que se encuentre en un Madrid calido. Ayer por la noche me vi Doctor Zhivago y la edad de la innocencia, ya se puede suponer que justo me levanto ahora y solo porque esta usted en el chat! me fascino la similitud en la abnegacion y comprension de dos de sus personajes: Tonya y May Welland, son casi el mismo personaje. Le dio a usted la misma sensacion?muchas gracias por ayudarme a levantar en un dia en el que la vida me gusta mucho menos…aunque siempre me guste vivir!

R.- No lo había pensado. Su paralelismo es muy acertado. Y qué mal les va a esas dos mujeres. Al menos Tonya disfrura brevemente del esplendos en la hierba con su amado Zhivago. May Welland ni eso. ¿Sabe algo que me obsesiona en La edad de la inocencia y que me ha ocurrido alguna vez? Lo ha adivinado usted: qué habría ocurrido si ella hubiera vuelto la cabeza. Pero me consuelo. Pocas veces he dejado pasar de largo los amores. Esta mañana a mí me encantaba vivir. Y no ocurría nada excepcional. Era la luz de la calle, la temperatura, pasearme casi en soledad por una maravillosa exposición dedicada a Pixar que se inaugura mañana. Conozco Glasgow, pero no Edimburgo ni los valles verdes de Escocia, ni sus destilerías. Aunque ahora me lo monto de sobrio. ¿Me aconseja usted la visita? Siempre he relacionado Escocia con el cine y la literatura. Dos de los escritores que más amo nacieron allí: Stevenson y Conan Doyle. Y de allí es también el último de los grandes actores que permanece vivo, junto a Kirk Douglas y Gene Hackman. Ya sabe a quién me refiero, a un tal Sean Connery. Tengo dudas sobre mi heterosexualidad cada vez que le veo. Qué pedazo de hombre.

P.- Carlos, ¿por qué eres tan bello, por fuera y por dentro?

R.- ¿Sabe usted adónde la voy a enviar? No se burle de un hombre viejo y cascado. No es cristiano.

P.- no sé si está entre tus favoritas pero a mí me conmueve contemplar con esa pausa una historia tan sutil y hermosa acerca de la vejez, de la incomunicación, de padres e hijos y de nuestro lugar en el mundo que es cuentos de tokyo.

R.- Es muy hermosa. Y parece muy sencilla. Ozu es un director especial. Y se lo dice alguien que se lleva fatal con el cine asiático. Desde antes de que se pusiera de moda. Y no era nada desdeñable el remake que hicieron hace un par de años de Cuentos de Tokio.

P.- ¿Conociste a Rafael Azcona? Si lo hiciste, ¿qué es lo que más te impresionó de él y cuál es el guión suyo que más te gusta? Gracias 🙂

R.- Simpático, irónico, original, buena persona aunque le sobrara inteligencia y mala hostia para ser el más malo. Le conocí a través de mi amigo Pepe García Sánchez, que siempre tuvo con él una relación fraternal. Escribió muchos guiones extraordinarios. Pero hay cuatro en estado de gracia: El pisito, El cochecito, Plácido y El verdugo.

P.- ¿no estás hasta la polla de la moda de los gin-tonics?

R.- Pues sí. Igual se pone de moda durante un par de temporadas la lejía con lima. Seguro que salen mogollón de expertos. Qué asco las putas modas, el esnobismo, la impostura. Y por supuesto, me ha encantado durante toda mi vida el gin tonic. Aunque mis bebidas favoritas son el vino y el whisky.

P.- Hola Carlos. En primer lugar darte la gracias por la recomendación de Trevanian…Ya me he papeado La sanción de Eiger y no puedo parar. Te quería preguntar por los documentales, ya que no sueles hacer referencia a ellos. ¿Alguna obra maestra dentro del género? Estoy con la serie de Apocalipsis de la II Guerra Mundial y es cojonuda. Un saludo!

R.- Compruebe lo desolado que se queda Jonathan Hemlock al final de La sanción de Loo. Ahi ya ni le consuelan sus cuadros. Después lea El Main y El verano de Katya. Le sorprenderán, parecen escritas por otra persona. Shibumi también es notable, aunque le aconsejo que se salte el larguísimo capítulo de las cuevas. Las nueve horas de Shoah me parecen el documental más estremecedor que he visto nunca.

P.- ¿Qué espera que marque la poesía del siglo XXI?

R.- ¿Y yo qué coño sé?

P.- Hola Carlos He instalado en mi PC Ubunto pero no funciona. Tú crees que arrancándolo en el modo nomodeset se solucionaría o tendría que desinstalar la tarjeta gráfica?. Gracias

R.- Casi mejor arrancándolo en el modo nomodeset. Aunque a veces yo lo arreglo desinstalando la tarjeta gráfica. Y tengo una fórmula secreta, pero no se la voy a contar a usted. Me la enseñó Bill Gates en un garaje.

P.- Después de lo mucho y bien que habló usted el año pasado de Jumpha Lahiri, me extraña que aún no haya dicho nada de su nuevo libro. Lo ha leído? Gracias

R.- Voy a comenzar hoy La hondonada. Con emoción anticipada. Tierra desacostumbrada es uno de los libros más hermosos que he leído en los últimos años. Mi único problema con Jumpha Lahiri es que paro demasiadas veces la lectura de lo que escribe para mirar su fotografía en las solapas de los libros. Y me enamoro todavía más. Tan inteligente, tan sensible, tan compleja, tan guapa. Sí se puede tener todo. Ella lo demuestra. Desgraciadamente, no es mi caso.