Amalia Arce

Pregunta.- ¡Hola, Amalia! Felicidades por tu libro. ¿Por qué crees que se han publicado recientemente tantos libros de pediatras? El tuyo, el de Jesús Martínez, el de José María Paricio… ¿Son más necesario que antes?

Respuesta.- Buenos días a todos! Hola Cecilia, en los últimos tiempos es una tendencia leer más sobre maternidad. Las madres especialmente buscan más información, quizá porque se ha perdido un poco la “tribu”. No nos hemos puesto de acuerdo, jejeje! Pero sí es verdad en que hay un momento de “boom”

P.- Buenos dias Amalia. Tengo dos niños mellizos de cinco meses. La niña desde que nació es muy llorona, se despierta muchas veces durante la noche, y le cuesta mucho volver a dormirse. Estoy muuy agotada, llevo cinco meses así. Que se puede hacer con una niña tan llorona? Felicidades por tu libro!!!

R.- Hola Sandra, gracias! Algunos bebés son más llorones y demandantes, es lo que se conoce como bebé de alta demanda y son más difíciles de criar. En cualquier caso sería interesante que se lo consultaras a tu pediatra para descartar alguna causa que lo justifique.

P.- En el calendario de vacunas (Madrid) han eliminado, además de la varicela, la del Neumococo 13 v, ¿qué puede provocar esa bacteria?

R.- El neumococo es una bacteria que puede originar diferentes cuadros infecciosos, algunos más “banales” como las otitis y otros más severos como las neumonías, las bacteriemias o las sepsis. Seguramente tras el cambio en el calendario vacunal haya un repunte de casos de enfermedad.

P.- ¿Cree que los pediatras actuales tienen la formación suficiente para asesosar sobre lactancia materna a las madres con o sin problemas en este tema?

R.- Pues dependerá de cada pediatra. La formación continuada es indispensable durante toda nuestra vida profesional. Yo creo que lo más sensato es si no se tienen los conocimientos adecuados, remitir a las madres a quien sí los tenga. En mi caso trabajo en “tándem” con otra pediatra experta en la materia, pero sí considero que puedo asesorar a las madres

P.- Hola, Lluc tiene 29 meses y des de hace 6 meses su actitud ha cambiado, es posible que a causa de que ha tenido un hermanito pero el caso es que desde hace unos 6 meses Lluc ha adoptado unas actitudes muy “pasotas” esta ahí pero no hace caso a nada, multitud de rabietas y desplantes, etc. Lo hemos llevado a un centro de diagnostico precoz y nos han dicho que el niño tiene mucha capacidad de aprendizaje y que es posible que le resultemos aburridos. ¿Qué podemos hacer, cómo actuamos?

R.- La edad de Lluc es la típica en la que empiezan las rabietas. Si además se ha producido un hecho vital importante como el nacimiento de un hermano, es normal que pueda mostrar algunas actitudes diferentes a las anteriores. La época de las rabietas se conoce como los “terribles dos”….así que paciencia! Es un momento de autoafirmación del niño que ya no es un bebé y decir NO, es su palabra favorita. Yo lo llamo una “mini-adolescencia”. Me resulta difícil pensar que unos padres “normales” le resulten aburridos a un niño de 2 años. Os recomendaría no perder la calma, ser afectuosos y tiempo al tiempo!

P.- Si no estoy de acuerdo con las ideas del pediatra de mi hijo respecto a su crianza (de hecho, no le pedí nunca la opinión), ¿cómo negarme sin ofenderle ni mentirle? Tipo, destetar a los 6 meses o introducir la alimentación complementaria con purés, no cogerle mucho en brazos…

R.- Hace unos pocos días, pasé una encuesta en el blog sobre si la gente mentía a sus pediatras…y la respuesta mayoritaria es que sí o que no les dicen toda la verdad. Sobre los temas en los que más “mienten” es sobre temas de crianza (sueño, dónde duerme el niño, etc) y sobre alimentación. Para mí supone hacer una reflexión importante…. Si la gente “nos miente”, por algo debe ser. Y en cuanto a las familias, no sé hasta qué punto mentir es la solución. Supongo que una relación bidireccional, con respeto hacia ambas partes…. Lo que sí que creo es que muchos aspectos de la crianza tienen que ver con la salud infantil. Y quizá por eso los pediatras “nos metemos donde no nos llaman”.

P.- ¡Hola, Amalia! ¿Qué supone tu blog para tí? ¿Y las redes sociales?

R.- El blog, después de 5 años, es una parte muy importante de mi vida. No diré como un hijo, porque es exagerado, pero de alguna manera, le dedico tiempo para explicar mis conocimientos o noticias que pueden ser interesantes, y también para que sea “bonito”. Las redes sociales tambié forman parte de mi actividad. Como decía el otro día Joan Carles March en el TATGranada, yo también “con twitter me acuesto y con twitter me levanto”. Tanto las redes como el blog, me han permitido conocer a mucha gente que de otra manera hubiera sido impensable, enrolarme en proyectos colaborativos como ha sido PediaTIC y sentirme útil.

P.- ¿Debe coger a mi bebé de dos meses en brazos para tranquilizarle cuando empieza a llorar o le estoy malacostumbrando?

R.- Por supuesto!!! Los niños “no se acostumbran” a los brazos, los niños necesitan brazos. Si no le coges ahora, dentro de un tiempo te aseguro que no se dejará 🙂

P.- ¿Pediatra bloguera o madre bloguera?

R.- Pues las dos cosas!! Una vez una compañera de las redes me dijo como “piropo” que yo hacía de bisagra entre esos dos mundos que a veces van en paralelo y no se “tocan”. Imposible separar mi faceta personal de la profesional. En twitter solo tengo una identidad: @lamamapediatra

P.- Hasta que edad es normal llevar pañal por la noche? Los cuatro años es demasiado? Cual es el mejor método para abandonarlo, levantar al niño?

R.- El control de esfínteres por la noche puede producirse de forma conjunta con el control diurno, pero en un procentaje no despreciable de niños, se producirá de forma más tardía, sin que esto sea patológico. Antes de los 5-6 años, son muchos los niños y niñas que llevan pañal por la noche sin que se considere una enuresis. A partir de esa edad las cifras van disminuyendo progresivamente.

P.- A veces me siento perdida por las discrepancias entre distintos pediatras. Vas a uno y te manda jarabes antimucolíticos, y vas a otro y te dice que no sirven de nada. Uno te dice que alternes paracetamol e ibuprofeno, y otro te dice que no… ¿Por qué hay tanto desacuerdo? ¿Cómo sabemos de quién fiarnos y a quién hacer caso?

R.- Es complicado responderte. Tienes razón. No nos ponemos de acuerdo. La realidad es que la evidencia científica dice que muchos medicamentos no tienen en realidad demasiado efecto, entonces para qué darlos? En defensa de los pediatras diré que estamos en una sociedad muy medicalizada, y muchas veces parece que si no recetas algo la familia no se queda contenta…. En cuanto a la alternancia de antipiréticos, está muy extendida, la fiebre da miedo. Ha habido diferentes tendencias y actualmente lo que se recomienda es utilizar uno de ellos y el otro, a modo de rescate cuando la fiebre da mal estado general.

P.- Mi bebé de nueve meses no ha cogido peso en el último mes y medio. Pesa ocho kilos y ha crecido 2,5 cm desde la última revisión de niño sano, a los 6 meses. Come muy bien y es bastante inquieto, ¿cuál puede ser la causa, debo preocuparme?

R.- Habría que evaluar cuál ha sido la curva de crecimiento, más que una determinación puntual y los cambios en la alimentación que se han introducido en ese último tiempo. Si te preocupa, coméntaselo a tu pediatra.

P.- ¿Qué opinas sobre la retirada de la vacuna de la varicela en casi toda España? ¿Merece la pena intentar buscarla fuera del país? Gracias

R.- La retirada de la vacuna de la varicela, me parece como a la mayoría de los pediatras, injustificada e inadecuada. Existe más libertad para no vacunar que para vacunar. Y la falta de explicaciones favorece los argumentos de los grupos antivacunas. Sobre si ir a buscarla fuera te diré que la gente lo está haciendo. A mí particularmente me preocupa que las vacunas estén en adecuada conservación durante el viaje.

P.- Eso de que lo importante es pasar “tiempo de calidad” con los hijos me suena a autojustificación de los padres que apenas ven a sus niños. ¿No tenemos demasiadas prioridades por delante de nuestros hijos?

R.- Los niños necesitan “cantidad de tiempo” y “calidad de tiempo”. La pregunta que me haces da para escribir un libro….Os recomiendo en este sentido uno que he leído recientemente de Carolina del Olmo, que se llama “Dónde está mi tribu”. Es difícil generalizar, hay gente que tiene otras prioridades y hay gente que tiene unas circunstancias que no le permiten hacerlo de otra manera. Creo que hay que huír de la culpabilidad porque es paralizadora y genera ansiedad. La mayoría de las personas da a sus hijos lo mejor que tiene….Y sí, también hay gente que está “desenfocada” y que tiene otra escala de varlores. Otro aspecto a tener en cuenta es la corresponsabilidad entre padre y madre. ¿Está repartido el cuidado y las responsabilidades del hogar?

P.- Buenos días, Amalia, es un placer tenerte aquí. Mi pregunta es de doble faz: como madre, ¿qué hay que hacer para tener una relación “sana” con tu pediatra? Me refiero a poder expresar tus opiniones e inquietudes sin parecer el típico progenitor sabihondo y tocanarices. Como pediatra, ¿qué actitud te gusta ver en los padres de tu consulta cuando tienen alguna discrepancia contigo? Muchas gracias por tu tiempo 🙂

R.- Me parece que lo más adecuado es “ir de cara” y poder expresarse libremente. Los pediatras no somos robots y la conexión personal también se da. Hay pacientes con los que te irías a tomar unas cañas y otras personas con las que no congenias tan fácilmente. En el caso del hospital donde yo trabajo, los pacientes pueden “elegir” pediatra y al final se da lo de que “cada oveja con su pareja”, se tienden a unir afinidades. En cuanto a discrepancias, no he tenido demasiados problemas. Seguramente algunos que no han estado muy de acuerdo, lo que han hecho es no volver… También me llegan pacientes “rebotados” de otros pediatras, quizá porque tras leerme, me identifican como alguien más flexible con las diferentes maneras de criar, de alimentar, etc..

P.- Que libro más bonito el tuyo, gracias por compartirlo con todos nosotros. ¿has llevado a tus hijas alguna vez al pediatra? En Madrid conozco uno que te podría recomendar. jejejej

R.- Hola Jesús!! Gracias!!! Sí!! Las llevé los primeros meses!!! Luego ya empecé a “saltarme” los controles e incluso las vacunábamos en casa. Para no hacerlo yo y ser el “top” de las “malas madres” las vacunaba mi hermana que es enfermera 😉 Actualmente lo que sí suelo hacer son las revisiones oftalmológicas y odontológicas….el resto, pues no #fail

P.- ¿La asociación española de pediatría es un referente para los pediatras? ¿debería serlo?

R.- La AEP es un marco común para los pediatras, con sus luces y sus sombras…. Yo no me identifico con algunas de sus acciones y en cambio sí con otras.

P.- ¿Qué opina del famoso “tirón” que se les hace a los bebés en las revisiones de niño sano?

R.- Ufff! Yo no lo hago. Mientras son pequeños lo habitual es que todos tengan fimosis. A los padres les recomiendo retirar la piel lo justo para limpiar bien la zona, sin tirones. Cuando son más mayorcitos, les digo a los propios niños que me enseñen ellos hasta donde pueden bajar la piel, sin forzar y sin que nadie les haga daño. Mi sensación es que hagas lo que hagas algunos acabarán irremediablemente en el quirófano, mientras que en una gran mayoría, la edad resuelve los problemas….

P.- ¿Cuántas veces recomiendas ir al pediatra en el primer año de nuestro bebé?

R.- Existen protocolos que establecen una serie de visitas recomendadas durante el primer año de vida. Con pequeños matices, cada comunidad autónoma establece un calendario de visitas. En nuestro centro los vemos una vez al mes hasta que tienen un año (y alguna visita más durante el primer mes de vida). Hasta los 7 meses, cada visita va asociada a “vacuna”. Entre los 7 meses y los 12 meses, el control puede ser más laxo si todo ha ido bien en cuanto a desarrollo físico y psicomotor.

P.- ¿Cuánto es “lo normal” que duerma durante el día un bebé de tres meses? ¿Cómo conseguirlo?

R.- La normalidad en el sueño del bebé es muy amplia en cantidad y en intervalos. Hay bebés que dormirán muchas horas, y además seguidas, y otros que no. La realidad es que lo más habitual es un sueño más fraccionado y que no siempre coincide con el sueño del adulto. Ahí es donde se producen los desajustes….. Aunque generalmente el bebé duerme más de lo que el adulto cree…. Más que fijarse como objetivo “conseguir” que el bebé duerma más, lo que quizá os sea de ayuda, es adaptar vuestras rutinas al tipo de sueño de vuestro hijo. Y por ejemplo, un consejo clásico: descansar cuando lo hace él. Los problemas de sueño son el principal “dolor de cabeza” de los padres recientes. Se calcula que durante el primer año de vida de tu hijo puedes perder entre 400 y 700 horas de tu sueño. Mejor asumirlo y tomárselo con humor!!

P.- ¿Vas a estar firmando en la feria del libro de Madrid? Me gustaría saludarte en persona

R.- No!!! Lo siento!! Ya me gustaría!!

P.- Hola Amalia, mi pregunta es más para tu lado de madre que de pediatra. Soy padre de una niña de 3 años y 5 meses. Al día de hoy es casi inminente el fallecimiento de mi suegro después de años de cáncer y no sé como afrontar este tema con ella. Me está quitando el sueño el momento en el cuál tendré que explicarle que el abuelo ya no está. ¿que debo hacer?

R.- Creo que a los niños no hay que ocultarles las cosas, hay que explicárselas utilizando un lenguaje que puedan comprender y también hay que incluirles en compartir el dolor. Muchas veces tenemos miedo a decirles las cosas y luego nos sorprenden con lo bien que lo aceptan y lo procesan, e incluso cómo nos dicen ellos mismos muchas palabras que son consoladoras para nosotros los adultos.

P.- Hola Amalia. Enhorabuena por el libro. ¿Qué opinas sobre que los niños duerman en la cama con los padres? Y si lo ves aconsejable, crees que hay una edad adecuada para que se les obligue a dormir solos. Gracias.

R.- Opino que cada uno haga lo que le parezca!! Más que “obligar” a dormir solos, hay que acompañarles en ese “trámite”. La edad, cada uno tiene que decidir cuál es la adecuada. A veces tenemos una idea y luego la realidad se impone (con diferencias entre hermanos, muchas veces)

P.- Buenos días, Amalia, no te conocía pero lo poco que he leído de tu entrevista me da plena confianza. Me gustaría preguntarte cómo enfocarías el tema de dormir cuando se trata de bebés de alta demanda en el sentido de despertarse mucho por la noche y necesitar a su madre para conciliar el sueño. Mi hija tiene 15 meses y resulta muy cansado, pero no sé cómo plantear el tema y desde luego no estoy por la labor de utilizar métodos tipo Estivill. Mil gracias.

R.- Ligado con la pregunta anterior….Difícil. La pregunta que te planteo es, ¿el padre qué opina? Puede participar de alguna manera? Hay un punto de inflexión sobre los 7-8 meses, a partir de ahí muchas veces se complican las noches…

P.- Tengo un niño de 29 meses que ha aprendido pronto a hablar y en poco tiempo,lo hacía correctamente y ahora de repente tartamudea. Estoy asustada por que me da la sensación que lo pasa mal cuando se engancha. Hemos pasado recientemente por una mudanza y otros cambios y no se si le ha podido afectar. Además no se termina de adaptar a la guardería, va desde que tiene 10 meses y aún llora al entrar, mientra otros niños de su edad no lo hacen. ¿Que actitud debo tener frente a todo esto? ¿Es normal?

R.- Con esa edad son muchos los niños que no articulan el lenguaje correctamente. Si ha habido muchos cambios y no acaba de estar adaptado a la guardería, puede ser normal que se afecte el lenguaje u otros aspectos del desarrollo. Te recomendaría paciencia, afecto y no dramatizar demasiado, tiempo al tiempo.